La vivienda, resistente a fuertes vientos y heladas, fue presentada por los científicos del Instituto Nacional de Investigación Polar (NIPR) en Tachikawa, Japón.
Se trata de un proyecto conjunto del NIPR, de la compañía Misawa y de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA).
Según comentó el servicio de prensa del NIPR, la vivienda representa una construcción cúbica formada por bloques de 3x6 metros, colocados sobre trineos y arrastrados por un todoterreno con orugas.
Las paredes están hechas de madera y llevan un revestimiento llamado Galvalume, que permitirá soportar temperaturas de hasta 45,3 grados centígrados bajo cero y vientos con velocidad de hasta 61,2 metros por segundo.
Los paneles solares (fotovoltaicos) permitirán acumular energía y calor para mantener una temperatura adecuada dentro de la vivienda.
Las pruebas de la casa polar comenzarán en febrero de 2020 en la base polar Syowa (también denominada Showa) que Japón tiene en la Antártida Oriental.