Según el estudio, los hombres con disfunción eréctil tienen un 59% más de probabilidades de contraer una enfermedad coronaria o aterosclerosis —cuando las sustancias grasas se depositan en el interior de las arterias—, un 34% más de probabilidades de sufrir un derrame cerebral y un 33% más de morir por cualquiera de estas causas, según el estudio. La investigación se basa en los resultados de otros 25 estudios en los que participaron 154.794 hombres.
Las enfermedades cardíacas y la disfunción eréctil a menudo aparecen debido a que se acumulan depósitos de grasa, colesterol y otras sustancias, denominadas placas, en las arterias. Como las arterias del pene son más estrechas que las del corazón, esas futuras enfermedades podrían manifestarse primero en forma de disfunción sexual, evitando que la sangre mantenga la erección, explican los investigadores. Como las arterias del corazón son más anchas, la dolencia podría tardar más en aparecer.
"La arteria dorsal del pene que transporta el flujo sanguíneo tiene un diámetro mucho menor, y son los vasos sanguíneos más pequeños los que muestran los primeros signos de enfermedad", explica a la CNN Ron Blankstein, doctor del Hospital Brigham and Women's de Boston, a propósito del estudio. De ahí que recomiende, además de prestar atención a los signos de la disfunción eréctil, dejar de fumar y controlar la diabetes y el colesterol, dolencias que también influyen en la salud del torrente sanguíneo.