Carballo participó junto a otra delegada de España y una de Italia en el Foro sobre parques y espacios públicos celebrado en la ciudad de Volgogrado (antigua Stalingrado) por iniciativa de la Asociación de Parques de Rusia.
En el evento tomaron parte unos 150 profesionales del sector de Moscú, San Petersburgo y otras ciudades de Rusia.
Fue en el Foro de Volgogrado donde Radio Sputnik conoció y entrevistó a Gabino Carballo, pidiéndole compartir sus impresiones del evento y del conocimiento de la legendaria ciudad rusa en el Volga, conocida por la batalla de Stalingrado, 200 días de combates encarnizados entre el Ejército Rojo y las tropas de la Alemania de Hitler en 1942-1943, en el marco de la Segunda Guerra Mundial.
"Para mí ha sido un éxito total", dice Gabino Carballo acerca de su participación en el Foro de Volgogrado y sobre las dos jornadas que duró su estancia en esa ciudad del Volga que permitieron a los delegados del evento conocer los sitios emblemáticos vinculados con la batalla de Stalingrado y toda la infraestructura de esa urbe, en primer término, sus parques y espacios públicos.
"La hospitalidad es parte de la cultura de esta ciudad, las personas se sienten responsables de sus huéspedes, y en este sentido es una experiencia magnífica", señala Gabino.
Volgogrado le ha dejado "una sensación muy agradable, muy positiva", dice el paisajista catalán.
"Tiene monumentos dramáticos y atractivos pero que están vivos que se relacionan con esta ciudad y la gente que todavía recuerda a sus abuelos, bisabuelos que lucharon aquí. Tiene industrias vivas, reales que en muchas ciudades se han desaparecido. Tiene un río que funciona como una especie de autopista de mercancías, pero tiene gente bañándose en las playas", explica.
Para el protagonista del programa, en Volgogrado "hay una dinámica bastante sorprendente y que no me la esperaba para nada".
Y en este sentido, agrega, "siempre es agradable descubrir una ciudad que, además, conserva una cosa, que es curioso, que conserva un importante carácter soviético".
Lo que ha visto en Volgogrado, "era realmente algo diferente de lo que yo conozco, esto es algo de esa era soviética", sostiene Gabino, quien opina que hay que conservarlo.
"Creo que todas las ciudades deben aspirar a eso: intentar darte una imagen particular que sea parte de la identidad de los ciudadanos. Y yo lo que veo es que Volgogrado tiene una identidad particular y eso es muy interesante. Para mí es poder decir un día viendo a lo mejor una fotografía, decir 'este es Volgogrado'", indicó.
"Y te llena de orgullo porque has estado allí, lo has conocido, lo reconoces y lo diferencias", agregó.
Al resumir sus impresiones tras realizar esta breve visita de dos días a Volgogrado, señala que "la realidad ha superado las expectativas, hemos tenido mucha suerte con todo".
"Yo a lo mejor, si me preguntan ¿tú me recomendarías visitar Volgogrado?, depende de la persona que sea, diría 'no vayas', a lo mejor a ti no… Pero conociendo amigos que les gusta viajar, experimentar y encontrar cosas de verdad, les diré: 'Sí, sí, vete y experimenta eso. Porque creo que te va a llamar la atención, te va a gustar, vas a tener algo que contar después'", dice.
Al hablar de Volgogrado y de lo que conoció en el Foro sobre parques y espacios públicos en Rusia, Carballo explica: "He visto otra dimensión que nunca había considerado. Extensiones enormes, una complejidad tremenda, espacio público, parques, donde tienes edificios históricos de muchísimo valor, además, barcos, lagos, agua, bosques, personas, actividades y la interacción con el resto de la ciudad. Es una complejidad que yo no conozco, es otra dimensión".
Preguntado con qué estado de ánimos se va de Volgogrado, Gabino Carballo contestó: "Me voy muy contento, pero quizás un poco triste porque no nos dura un día más. Y con ganas de volver".