Los militares dispararon contra los blancos a una distancia de 8 a 40 kilómetros y destruyeron alrededor de 150 objetivos.
El 2S4 Tiulpan es un mortero autopropulsado soviético destinado a destruir fortificaciones, personal, armas y maquinaria bélica del enemigo. También puede disparar municiones nucleares de dos kilotones de potencia.