A menudo acudía a una pista especializada para llevarlos hasta el límite. También participaba en carreras automovilísticas. Al huir de Irán durante la revolución que dio lugar a la actual República Islámica de Irán, el sha dejó tras de sí toda una flota de vehículos que ahora integran el Museo de Automóviles de la Realeza, fundado en su última residencia.
El museo se divide en dos exposiciones principales con Rolls-Royce y Mercedes Benz. En esta galería de fotos, Sputnik te abre las puertas del garaje del último monarca de Irán.