En la grabación se puede ver cómo dos hombres abusan brutalmente y acosan al robot durante una serie de pruebas de estrés, diseñadas para probar que la maquina continuará acatando sus órdenes bajo cualquier circunstancia.
Los investigadores empujaron al robot, lo golpearon con un palo de hockey, una botella y un látigo. Por si fuera poco le dispararon con un arma de fuego mientras trataba de cumplir sus tareas.
En cierto momento, la máquina, apodada Atlas, se queda paralizada y de repente propina un golpe en la entrepierna a uno de sus acosadores y ataca al otro. Después de eso, apunta con un arma a los investigadores.
Al final de la grabación, los espectadores pueden sentir una mezcla de decepción y alivio, ya que los productores revelan que ningún robot ha sufrido durante el rodaje del vídeo. Resulta que se creó con ayuda de imágenes generadas por ordenador y tecnología de pantalla verde.
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No es sorprendente que muchos usuarios empezaran a preocuparse por una posible rebelión de las máquinas tras ver que Atlas podía caminar por las superficies irregulares, recuperarse después del vuelco y brincar.
"Un día estas imágenes serán utilizadas contra la humanidad", comentó R Mans.
"Los robots van a ver un día este vídeo y...", insinuó Royce Muzic.
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