Lo dijo al intervenir en la conferencia de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) sobre la lucha antiterrorista que se celebra del 25 al 26 de marzo en la capital de Eslovaquia, país que actualmente preside este organismo.
Señaló que Rusia aprecia mucho el diálogo que se desarrolla en el marco de la OSCE, especialmente sobre los asuntos clave de las amenazas internacionales.
Pero al mismo tiempo constató que la OSCE desde 2016 no logra coordinar la declaración antiterrorista ni confirmar su apego al cumplimiento de unas importantes resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y lo calificó como "una señal alarmante y una prueba de que la cooperación antiterrorista internacional patina.
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Prevención de actitudes radicales
El vicecanciller ruso también propuso elaborar un código de conducta para los medios y otras fuentes de información públicas.
"Proponemos examinar la iniciativa rusa sobre 'restricciones voluntarias contraterroristas' de los medios y los funcionarios públicos", dijo.
El diplomático ruso llamó a la comunidad internacional a fortalecer la cooperación y el intercambio de información en ese ámbito, así como "poner en marcha nuevos formatos de colaboración".
De acuerdo con la Cancillería rusa, ese código debe incluir un conjunto de normas encaminadas a evitar "exacerbar un contexto mediático negativo capaz de provocar actitudes de radicalización individual, social y política que llevan al terrorismo".