Desayuna todos los días
El desayuno es la comida más importante del día, ya que nos proporciona la energía necesaria para el resto del día.
Para perder peso, apuesta por un desayuno fuerte y una cena liviana. Un desayuno saludable debe contener alrededor de un 25% de las calorías diarias, o entre 300 y 500 calorías, y aportar tanto fibra como proteínas. Según varios estudios, las personas que se saltan el desayuno, suelen tener sobrepeso.
Bebe suficiente agua
El agua limpia nos permite librarnos de las toxinas, además, desempeña un papel fundamental en el metabolismo de los alimentos.
Mientras que tomar entre 1,5 y 2 litros de agua al día nos permite perder peso sin hacer dieta, beber agua con las comidas aumenta la sensación de saciedad, de modo que comemos menos.
Asimismo, es fundamental que distingas si tienes hambre o sed. Si te parece que tienes hambre, simplemente bebe un vaso de agua y espera varios minutos.
Aumenta el consumo de fibra
Los alimentos ricos en fibra, como cereales, frutas o verduras, promueven la sensación de saciedad, además de reducir la absorción de colesterol.
Pero lo más importante es que esta sustancia es capaz de estimular los movimientos peristálticos y ayudar al tránsito intestinal.
Reduce la ingesta de sal
Reducir el consumo de sal a una cucharadita o menos al día —o unos 2 gramos— puede ayudarte a perder peso, ya que esta sustancia retiene líquidos que hacen tu cuerpo esté más 'hinchado'.
Asimismo, es necesario evitar los alimentos salados, como salsas, embutidos o algunos quesos.
Sin embargo, no tienes que dejar de consumir la sal por completo, ya que es uno de los elementos químicos que regulan la hidratación en nuestro cuerpo.
Cocina en casa
Si quieres adelgazar, trata de cocinar en casa, ya que los platos precocinados o de restaurante contienen un promedio de 200 calorías más que los preparados en casa, además de contener más sal y azúcar.
Deja el tenedor después de cada bocado
Según afirman algunos nutricionistas, este insólito truco te permitirá perder un par de kilos.
Este ritual alimenticio te ayudará a ampliar la duración de tu comida y, como resultado, ahorrar cientos de calorías. Asimismo, es necesario comer despacio y masticar bien los alimentos.
El hecho es que unos 20 minutos después de empezar a comer, nuestro cerebro segrega una hormona que nos indica que ya estamos saciados, pero esta señal llega tarde si comemos demasiado rápido. ¡Escucha a tu cuerpo!
No comas frente a una pantalla
De acuerdo con un estudio de gran escala publicado en The American Journal of Clinical Nutrition, comer frente al televisor u ordenador nos hace engordar, ya que las personas que comen distraídas, consumen un 10% más calorías sin darse cuenta, algo que aumenta 37 veces la probabilidad de tener sobrepeso.
Para adelgazar, opta por los 'snacks' saludables, como palitos de zanahoria o apio.
Más del asunto: Dan a conocer la dieta más antigua y eficaz