El conductor, un hombre de 44 años, logró sobrevivir al accidente y solo sufrió heridas leves, según la policía local.
El vehículo se estrelló delante del túnel de Borik, en el noreste de Eslovaquia. Según las pruebas, el conductor, que viajaba solo, no había ingerido alcohol pero al parecer se quedó dormido. No hubo otras víctimas ni automóviles dañados.