Según explicó Lahoud, desde comienzos de 2016 se registró un aumento promedio de 500% en el costo de la luz y más de 600% en el precio del gas en la ciudad de Buenos Aires. En el resto de país los niveles de aumento fueron menores, pero el incremento no estuvo por debajo de 300%. Además, se constataron casos donde los aumentos superaron incluso el 2000%.
"Todo esto ha puesto en riesgo la capacidad que puede tener un ciudadano para poder pagar las tarifas de servicios básicos. Al no poder pagar, o al haber una dificultad creciente en los presupuestos ya muy debilitados por el avance de la devaluación y de la inflación en estos dos últimos años, hay un desequilibrio de la ecuación energética por el lado de la accesibilidad de los ciudadanos al servicio público", sostuvo el docente.
Asimismo, el libro analiza los beneficios que reciben las empresas encargadas de brindar los servicios afectados por la suba de precios.
"El otro aspecto es la consolidación de una escenario energético donde un conglomerado de empresas en el rubro de producción de gas, petróleo y energía eléctrica se han visto beneficiadas a partir de subsidios otorgados por el Gobierno nacional. Esto es la contracara de los tarifazos, porque aquí hay un esquema de transferencia de recursos que parten de todos los ciudadanos a este conjunto de empresas privilegiadas", aseguró Lahoud.