"No es un secreto que el mayor obstáculo para la adopción masiva de un procesador nacional es la falta de programas necesarios, adaptados para los ordenadores [basados en él]", afirmó Konstantín Solodujin, director general del Centro Nacional de Informatización (NCI, en por sus siglas en ruso).
Junto con el creador de la familia de los procesadores rusos Elbrús —de la empresa MCST—, las dos partes se comprometieron a reunir más de 20 empresas informáticas para impulsar el desarrollo del ecosistema del procesador, es decir, crear las aplicaciones adaptadas para los ordenadores Elbrús.
La iniciativa parte de que los dos procesos necesitan desarrollarse paralelamente para que los Elbrús alcancen popularidad y éxito comercial. Primero, más productos de 'hardware' basados en Elbrús deben salir al mercado, algo que ya está en marcha en las industrias de ingeniería y energía.
Están en venta ya hace un año: Ya no son prototipos: los procesadores rusos avanzan hacia la comercialización
Segundo, esta variedad de equipos debe ir dotada con todo el 'software' necesario, y de alta calidad, para facilitar la eventual sustitución de los productos extranjeros.
"El ecosistema de los programas es un factor determinante para el éxito de una plataforma computacional. Los procesadores rusos necesitan una amplia selección de 'apps' y toda la industria necesita a los especialistas capaces de crearlas", opinó Alexandr Kim, el director general de INEUM, citado por el comunicado.
Además de ser cómodo para distribuir los programas necesarios, este modelo permitiría a los desarrolladores vender sus productos potencialmente a todos los usuarios de los Elbrús a la vez, lo que podría atraer más emprendedores informáticos rusos en la iniciativa.
Ejemplo: AliveColors, el 'Photoshop' ruso hace su estreno (vídeo)
El Elbrús es el nombre de la familia de los microprocesadores de diseño y fabricación rusa.
Si bien por el momento los Elbrús no alcanzan el nivel de los desarrollos más avanzados de la estadounidense Intel u otros gigantes de la industria electrónica, la grieta va disminuyéndose a ritmos notables y, además, desde MCST recuerdan que para las tareas cotidianas no son necesarios los procesadores más sofisticados.
Más sobre la comparación: Competencia para Intel: ordenador ruso llega a la fase de preproducción