El 25 de mayo, justo antes del cierre del museo, uno de los últimos visitantes irrumpió en la sala de pinturas de Iliá Repin y rompió el vidrio de protección del cuadro "Iván el Terrible y su hijo" con una barrera metálica, dañando gravemente el lienzo.
El lienzo se rompió en tres lugares en la parte central de la imagen del zarévich, sufrió mucho deterioro el marco del cuadro, pero su parte más valiosa — los rostros y las manos de ambos personajes — quedó intacta afortunadamente.
"Es un suceso estremecedor que testimonia la existencia de mucha agresión en la sociedad, el cuadro "Iván el Terrible y su hijo" es muy frágil y muy valioso, abandonó la galería solo durante la guerra", dijo Tregúlova agregando que la Tretiakov propone iniciar el debate sobre el recrudecimiento del castigo por los delitos como éste.