¿No saben ni cómo mentir?
De los creadores de 'Masha y el oso es propaganda para Putin', y que tienen los derechos de propiedad intelectual de la frase 'highly likely', llega ahora: 'Los rusos nos han hackeado las investigaciones de la vacuna del coronavirus'.
El Centro Nacional de Ciberseguridad británico publicó este jueves un informe en el que detalla que los ataques en cuestión fueron realizados por el grupo conoсido como 'APT29', 'los Duques' u 'Oso acogedor'. "A lo largo de 2020, APT29 ha atacado varias organizaciones, involucradas en el desarrollo de una vacuna contra el Covid-19 en Canadá, EEUU y Reino Unido, muy probablemente con la intención de robar información y propiedad intelectual, relacionada con el desarrollo y la prueba de las vacunas", esgrime la pieza literaria de ficción.
El dossier insiste en que este grupo de hackers muy probablemente –en un 95%– forma parte de los servicios de inteligencia rusos. Entonces, salió al ruedo el ministro de Asuntos Exteriores de Reino Unido, Dominic Raab. Lanzó un comunicado en el que acusó a la inteligencia rusa de ciberataques "irresponsables" y "completamente inaceptables".
Y una vez más Raab y demás autoridades del Reino Unido quedaron en evidencia de que no se informan ni para mentir. La respuesta del director del Fondo de Inversión Directa de Rusia (RDIF), Kiril Dmítriyev, los deja al desnudo.
Dmítriyev enfatizó que Moscú "no tiene que 'robar' algo de Oxford, ya que AstraZeneca, la empresa farmacéutica con sede en Londres que desarrolla una vacuna contra el Covid-19, ya acordó con una de nuestras compañías de cartera, R-Farm, la producción de las vacunas de Oxford en Rusia. Por eso no hay que robar nada, no hay necesidad de secretos. Todo ya fue transferido a R-Farm, que va a producir la vacuna de AstraZeneca en Rusia con el uso de todas las tecnologías", advirtió. Le faltó decir: ¿hay alguien en casa, Mc Fly?
Asimismo, atacó el posible verdadero sentido de esa falsa acusación británica. "Creo que toda esta historia es un intento de manchar la vacuna rusa por parte de quienes temen su éxito, ya que la vacuna rusa potencialmente puede ser la primera en el mercado y potencialmente la más exitosa. […] Son las típicas acusaciones sin prueba alguna ni confirmaciones".
El Gobierno británico y sus porcentajes
También el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, rechazó estas acusaciones de Londres. Incidió en que el Kremlin no entendía "qué es un 95% de certeza de los servicios especiales británicos" y "por qué no es el 96% y no el 94%". "Al parecer, los servicios especiales británicos usan algún método de cálculo especial", ironizó.
"Realmente estamos viviendo una campaña política de descrédito a todo nivel. Una campaña política en la que están en juego miles de millones de dólares y un prestigio internacional que evidentemente alcanzaría a los laboratorios o al país de referencia quien alcanzara una medicación plausible y efectiva contra el Covid-19, o bien directamente la vacuna", concluye Eduardo Luque.