"No estamos preparados a asistir a un mayor deterioro del presupuesto ni la capacidad militar de este país", desafió en un programa político de la BBC.
"Somos el partido de la Defensa y estoy decidido a hacerlo bien en equipo", tuiteó Mercer al regresar de su distrito electoral en el oeste de Inglaterra.
Defensa se omitió en el discurso central de los Presupuestos Generales del Estado, que presentó el titular del Tesoro, Philip Hammond, la semana pasada.
Parlamentarios de distintas formaciones, tanto con escaño en los Comunes como en los Lores, han saltado la alarma sobre la política en Defensa del Ejecutivo May que, según denuncian, "no es creíble".
"En el momento presente mantenemos una posición en defensa del Reino Unido que parece sofisticada … pero no estamos poniendo el dinero para hacerla creíble", denunció el laborista lord Soley.
Las Fuerzas Armadas tienen asegurado un presupuesto de 36.000 millones de libras en el presente ejercicio fiscal y el Gobierno se ha comprometido a gastar en Defensa el 2% del PIB.
En su primera sesión de control al frente del ministerio, este 27 de noviembre, Williamson ha recordado el compromiso gubernamental de "aumentar el presupuesto un 0,5% por encima de la tasa de inflación cada año".
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Una revisión en marcha de la seguridad nacional ha forzado a Defensa a identificar nuevas áreas de eficiencias y recortes presupuestarios.
Diputados y lores temen tijeretazos en los activos y marinos de la Armada Real como resultado de una revisión que puede proponer el fortalecimiento de las defensas contra ataques cibernéticos.
